Conclusión de la autopsia: anciana de Zaragoza se suicidó en un nicho
En un giro sorprendente de los acontecimientos, se ha esclarecido el misterio que rodeaba la muerte de Rosa María Giménez Wangtiang, una octogenaria cuyo cuerpo fue hallado en un nicho del cementerio de Torrero en Zaragoza. Tras casi cien días de búsqueda desde su desaparición, reportada por su familia el día de Año Nuevo, la investigación ha llegado a un punto crucial. La autopsia realizada por el Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses de Aragón (Imlcfa) ha determinado que Rosa María puso fin a su vida mediante la ingesta de múltiples pastillas y alcohol, posteriormente encerrándose en una tumba y sellándose tras una lápida.
Este descubrimiento ha permitido descartar cualquier hipótesis de muerte violenta, aportando cierto cierre al doloroso capítulo para la familia y allegados de la fallecida. La decisión de Rosa María de elegir tal lugar para su último descanso ha dejado a la comunidad y a los investigadores conmocionados y reflexivos sobre las circunstancias que la llevaron a tomar tal decisión.
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