El estruendo de los tambores y bombos resuena en Calanda con emoción desbordada tras dos años de pandemia

CALANDA (TERUEL), 15 (EUROPA PRESS)

El estruendo de miles de tambores y bombos ha resonado en la localidad turolense de Calanda este Viernes Santo, en el tradicional acto de la Rompida de la Hora, suspendido dos años por la pandemia de coronavirus. El ensordecedor sonido se ha expandido, desde la plaza de España, por todo el municipio, que ha vivido con emoción desbordada el anuncio de la muerte de Cristo en esta celebración de la Semana Santa.

La Rompida de la Hora ha congregado a vecinos y visitantes en el centro de Calanda, ataviados con su túnica morada y provistos de bombos y tambores. Todos expectantes a la orden del alcalde, Alberto Herrero, que con su bastón de mando ha dado la señal del inicio de este cinematográfico espectáculo.

Precisamente, una escultura del cineasta Luis Buñuel, natural de esta localidad, ha arropado a los cofrades en el acto más simbólico de la Semana Santa calandina. La obra, realizada en bronce y de tamaño real, tiene como autor al artista Daniel Elena.

Este año, el personaje invitado a participar en la Rompida de la Hora ha sido la actriz Lara Dibildos, hija del productor de cine José Luis Dibildos y de la popular presentadora de televisión y actriz de publicidad de los años 60, Laura Valenzuela.

ÚNICO Y SINGULAR

Lara Dibildos ha estado acompañada por el alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, amigo del alcalde y que también ha querido sumarse a este emocionante acto religioso, junto a la consejera de Presidencia del Gobierno de Aragón, Mayte Pérez.

Con puntualidad británica, a las 12.00 horas, numerosos bombos y tambores han roto el silencio al tocar al unísono anunciando la muerte de Cristo. Esta tradición de la Semana Santa es característica en diversos municipios del Bajo Aragón, que conforman la Ruta del Tambor y el Bombo, pero que lo celebran a las 00.00 horas del Viernes Santo.

La Semana Santa de Calanda ha sido declarada en 2001 Fiesta de Interés Turístico en Aragón y desde 2004 tiene el título de Fiesta de Interés Nacional.

Los alrededor 4.000 habitantes de esta localidad turolense, situada en la Comarca del Bajo Aragón, han visto más que duplicado su número esta Semana Santa, gracias a la llegada de visitantes que han querido participar y conocer un evento único en España y de los más significativos en cuanto a la celebración de la Pasión y Muerte de Cristo.